ALUM MAHAD IBRAHIM (PH.D. 2009) ESCRIBE DESDE LA PRIMERA LÍNEA DE LA LUCHA DEL ÉBOLA
AUDIO
Radio Motherboard habla con alumbre I Escuela Mahad Ibrahim, que consultó con el Ministerio de Salud y Bienestar Social de Liberia con el fin de organizar la información que sale de la epidemia, y otros expertos de Ébola.
48:34 minutos (22.24 MB)
15 de julio 2015
Cuando Mahad Ibrahim mira a la lucha contra el Ébola en África occidental, que ve más que un problema de salud pública o un desafío humano - que ve un reto datos.
Comprender y detener la propagación de Ébola requiere un seguimiento cuidadoso de los datos de salud pública de toda la región. La digitalización de los datos parece un paso obvio - pero en la primera línea, las respuestas no son tan simples.
De la placa base
Comprender y detener la propagación de Ébola requiere un seguimiento cuidadoso de los datos de salud pública de toda la región. La digitalización de los datos parece un paso obvio - pero en la primera línea, las respuestas no son tan simples.
De la placa base
por Mahad Ibrahim
Temprano en la mañana del 13 de enero de 2015, caminaba con dos trazadores de contacto liberianos veinte y pico a través de los caminos de tierra caóticas de su comunidad local, Nueva Kru Town, en el extremo noroeste de Monrovia, capital de Liberia.
Era tarde en el brote de Ébola, que comenzó en marzo de 2014, y los casos fueron disminuyendo. Los trazadores de contacto se encargaron de comprobar temperaturas y preguntar por la salud de sus vecinos que habían estado expuestos al virus. Cada vez más, las rondas diarias pasaron sin incidentes.
En esa mañana en particular, cerca del final de su ronda, nos encontramos con un conjunto pesado, mujer de mediana edad frenando vómito y visiblemente sudando mientras luchaba para presentarse a nosotros. Ella fingió una buena salud, aunque sus síntomas cumplen la definición de un caso sospechoso de Ébola.Contra sus deseos, llamamos a las autoridades, que la llevaron al centro de tratamiento más cercano.
La familia de la mujer que vivía en una casa comunal que fue devastado por el Ébola. La casa tenía más de cinco muertes por desgracia anteriores, un escenario demasiado común después de nueve meses de brote, y el espectro de la sexta era probablemente más de esta familia podía soportar.
Afortunadamente, la mujer dio negativo. Y el 9 de mayo, la Organización Mundial de la Salud declaró el brote de Ébola en Liberia terminado.
El respiro duró un mes y 20 días. Y luego, de repente, el ébola estaba de vuelta ....
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Temprano en la mañana del 13 de enero de 2015, caminaba con dos trazadores de contacto liberianos veinte y pico a través de los caminos de tierra caóticas de su comunidad local, Nueva Kru Town, en el extremo noroeste de Monrovia, capital de Liberia.
Era tarde en el brote de Ébola, que comenzó en marzo de 2014, y los casos fueron disminuyendo. Los trazadores de contacto se encargaron de comprobar temperaturas y preguntar por la salud de sus vecinos que habían estado expuestos al virus. Cada vez más, las rondas diarias pasaron sin incidentes.
En esa mañana en particular, cerca del final de su ronda, nos encontramos con un conjunto pesado, mujer de mediana edad frenando vómito y visiblemente sudando mientras luchaba para presentarse a nosotros. Ella fingió una buena salud, aunque sus síntomas cumplen la definición de un caso sospechoso de Ébola.Contra sus deseos, llamamos a las autoridades, que la llevaron al centro de tratamiento más cercano.
La familia de la mujer que vivía en una casa comunal que fue devastado por el Ébola. La casa tenía más de cinco muertes por desgracia anteriores, un escenario demasiado común después de nueve meses de brote, y el espectro de la sexta era probablemente más de esta familia podía soportar.
Afortunadamente, la mujer dio negativo. Y el 9 de mayo, la Organización Mundial de la Salud declaró el brote de Ébola en Liberia terminado.
El respiro duró un mes y 20 días. Y luego, de repente, el ébola estaba de vuelta ....
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